complejo. El cuerpo humano se compone de unidades estructurales
denominadas células. Cada célula contiene una parte central llamada núcleo,
que está rodeada por citoplasma, a su vez envuelto por una pared. En el
núcleo hay genes que contienen los patrones codificados según los cuales se
construyen las diferentes proteínas del cuerpo. Estos genes se unen en
cadenas llamadas cromosomas. Cuando va a generarse descendencia, los
cromosomas de una célula deben duplicarse y dichos cromosomas duplicados
van luego a un espermatozoide o a un óvulo. Un espermatozoide se une con
un óvulo y la célula resultante procede luego a dividirse y el embrión comienza
a crecer.
Si uno o ambos padres tienen genes defectuosos y si los genes
defectuosos del progenitor están en esa mitad que es transmitida al
espermatozoide y al óvulo, entonces el bebé tendrá genes defectuosos y
podría sufrir defectos estructurales o funcionales en su cuerpo. Tanto en el
proceso de duplicación y separación que produce espermatozoides y óvulos
como en el desarrollo inicial del feto, si un gen no se duplica adecuadamente, o
si se pierde una porción del cromosoma, o si los cromosomas se rompen y
reordenan en un modo inadecuado, o si se transfieren al espermatozoide o al
óvulo demasiados cromosomas o muy pocos, en todos estos casos pueden
manifestarse defectos estructurales o funcionales en el cuerpo.
A través de las eras ha habido siempre (en lo que nosotros alcanzamos
a saber) niveles bajos de radiaciones cósmicas con capacidad para producir
mutaciones genéticas y cromosómicas. Además, infecciones víricas que
pueden inducir mutaciones (tales como el virus del sarampión) han estado
entre nosotros desde hace tiempo. La humanidad ha introducido, sin embargo,
varios nuevos factores en su medio ambiente que pueden aumentar
significativamente el número de mutaciones. Las radiaciones de alta energía
producidas por los aparatos de rayos X, o materiales radiactivos, o pantallas de
vídeo; algunos productos químicos (gas mostaza, formaldehído, dioxanos,
cafeína, el humo del tabaco, alcohol, leqad, herbicidas, tinturas cáusticas,
epóxidos, etil-uretano, fenoles, cloruro de manganeso, bromouracilo) y algunas
drogas (LSD, dietiletilbestrol, aspirina, hormonas) se ha demostrado que
aumentan el número de mutaciones. La madre gestante es quien por lo general
ha de evitar estos agentes mutágenos pero en algunos casos la mutación
puede originarse en el padre. Se ha demostrado que los soldados que estaban
encargados de la tarea de esparcir herbicidas en Vietnam procrearon un
número inusualmente elevado de niños con malformaciones cuando regresaron
junto a sus esposas en los Estados Unidos.
Los clarividentes ven que muchos defectos congénitos tienen su origen
en una vida anterior. Max Heindel refiere (El Velo del Destino) que cuando la
fuerza creadora ha sido desperdiciada en una vida para la satisfacción de las
pasiones, hay entonces una escasez de fuerza creativa disponible para la
construcción del cerebro, sistema nervioso y laringe en la siguiente vida. De
esta forma puede que el Ego nazca en un cuerpo con defectos mentales, del
sistema nervioso o del habla. El materialismo en una vida puede conducir a la
construcción de un cuerpo en la siguiente vida en el que las partes blandas
están endurecidas y partes que deberían ser duras están reblandecidas. Hacer
caso omiso de la verdad reiteradamente en orden a servir los propios deseos
egoístas en una vida puede conducir a un desajuste entre el Ego y las fuerzas
de la verdad cuando el arquetipo del cuerpo físico para la próxima vida está
siendo formado. Esto puede conducir a una malformación del arquetipo y, por
consiguiente, malformación del cuerpo en la vida próxima. Aquellos que no
logran hacer un uso apropiado de sus sentidos en una vida, que tratan de
aislarse del mundo alrededor de ellos, que ignoran los gritos de ayuda o la
oportunidad de ver las condiciones y necesidades de otros, pueden sufrir
deficiencias auditivas o visuales en su próxima vida.
Los clarividentes, además, ven algunos defectos congénitos que no son
debidos a acciones en una vida anterior. Algunos Egos pueden no haber hecho
nada particularmente erróneo pero tal vez necesiten concentrarse en el
desarrollo de ciertos poderes del alma y habitar un cuerpo con ciertas
limitaciones puede ayudarles a centrar sus esfuerzos en el desarrollo de esos
poderes del alma mientras luchan por superar dichas limitaciones. Algunos
Egos pueden encontrarse en el proceso de reestructurar un órgano en
particular y puede que en los estados de transición ese órgano no funcione
bien. Este es el origen de algunos de los problemas oculares que sufre la
gente, ya que el ojo está en proceso de ser reestructurado para que en vez de
recibir rayos reflejados y formar una imagen en la retina, el llamado punto ciego
sea sensibilizado y la gente mirará entonces desde dentro del ojo y verá
directamente el objeto en sí, desde dentro y fuera a un tiempo. Justo antes de
que un Ego entre en un feto, contempla un panorama de la vida próxima. Si el
Ego ve que una vida particularmente difícil le está reservada, es presa del
pánico y trata de escapar del vientre materno, puede causar una desconexión
parcial entre los centros sensoriales del cuerpo etérico y cuerpo denso, de
forma que la cabeza etérica se extienda sobre la física. Así pues el espíritu no
puede entrar en el cuerpo y controlarlo. Un retraso mental sobreviene.
El científico materialista ve los defectos congénitos como el resultado de
la herencia, factores ambientales y el "azar" (el cual determina qué genes
recibirá la descendencia de cada progenitor y qué genes y cromosomas son
influenciados por factores ambientales). El clarividente ve los defectos
congénitos como el resultado de acciones pasadas y necesidades presentes de
desarrollo del alma por parte del Ego encarnante. Estos dos puntos de vista
pueden ser aunados si se concede que aquellos sucesos atribuidos al "azar"
son, de hecho, controlados inteligentemente.
Podríamos tener entonces el
siguiente cuadro unificado: un Ego, debido a acciones pasadas o a
necesidades presentes del desarrollo del alma, tiene necesidad de habitar un
cuerpo con ciertas limitaciones. Los Ángeles Archiveros encuentran para este
Ego unos padres que pueden proporcionar genes y estructuras cromosómicas
adecuadas, y los Ángeles Archiveros supervisan el proceso de replicación para
asegurar que se obtiene de cada padre el juego de genes apropiados y que
esos genes son (si es necesario) mutados según lo requieran las necesidades
del Ego encarnante. Este cuadro resulta cierto en los casos en que suceden
mutaciones "naturales". Cuando los humanos introducen agentes mutágenos
en su medio ambiente, ya no se da la situación natural. El hombre ha recibido
libre albedrío y tiene el poder de hacer cosas dañinas para él y para otros.
Cuando el hombre introduce agentes mutágenos en su medio ambiente puede
estar iniciando una cadena de causa y efecto. Puede estar causando
malformación y disfunción de cuerpos que de otra manera habrían sido
completos. En tales casos se están acumulando deudas que necesitarán ser
canceladas en un tiempo futuro.
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LOs defeitos congênitos
O processo físico mediante o qual se gera uma criança é bastante complexo. O corpo humano se compõe de unidades estruturais denominadas células. Cada célula contém uma parte central chamada núcleo, que está rodeada por citoplasma, por sua vez envolto por uma parede. No núcleo, há genes que contêm os padrões codificados segundo os quais são construídas as diferentes proteínas do corpo. Esses genes se unem em cadeias chamadas de cromossomos. Quando a descendência é gerada, os cromossomos de uma célula devem duplicar-se. Os ditos cromossomos duplicados vão logo a um espermatozóide ou a um óvulo. Um espermatozóide se une com um óvulo e a célula resultante começa logo a dividir-se e o embrião começa a crescer.
Se um ou ambos os pais possuem genes defeituosos e se os genes do progenitor estão nessa metade que é transmitida ao espermatozóide e ao óvulo, então o bebê terá genes defeituosos e poderá sofrer defeitos estruturais ou funcionais em seu corpo. Tanto no processo de duplicação e separação que produz espermatozóides e óvulos como no desenvolvimento inicial do feto, se um gene não se duplica adequadamente, ou se é perdida uma porção do cromossomo, ou se os cromossomos se rompem e se re-ordenam de um modo inadequado, ou se são transferidos para o espermatozóide ou para o óvulo demasiados cromossomos ou muito poucos, em todos esses casos podem manifestar-se defeitos estruturais ou funcionais no corpo.
Até onde podemos saber, sempre houve, através dos tempos, em níveis baixos, radiações cósmicas com poder de produzir mutações genéticas e cromossômicas. Além disso, infecções viróticas que podem induzir mutações, como o vírus do sarampo, têm estado conosco há bastante tempo. A humanidade introduziu, sem dúvida, vários novos fatores em seu meio ambiente que podem aumentar significativamente o número de mutações. Foi demonstrado que as radiações de alta energia produzidas pelos aparelhos de raios X ou materiais radioativos ou telas de vídeo, alguns produtos químicos (gás mostarda, formaldeidos, dioxanos, cafeína, o fumo do tabaco, álcool, herbicidas, tinturas cáusticas, epóxidos, etil-uretana, fenóis, cloreto de manganês, bromo-uracila) e algumas drogas (LSD, dietiletilbestrol, aspirina, hormônios) aumentam o número de mutações. A mãe gestante é quem em geral deve evitar esses agentes mutágenos, mas, em alguns casos, a mutação pode originar-se no pai. Demonstrou-se que os soldados que estavam encarregados da tarefa de espargir herbicidas no Vietnam procriaram um número inusitadamente elevado de crianças com malformações quando regressaram para junto de suas esposas nos Estados Unidos.
Os clarividentes vêem que muitos defeitos congênitos têm sua origem em uma vida anterior. Max Heindel afirma (O Véu do Destino) que, quando a força criadora é desperdiçada em uma vida para a satisfação das paixões, há então uma escassez de força criadora disponível para a construção do cérebro, sistema nervoso e laringe na vida seguinte. Desta forma, pode ser que o Ego nasça em um corpo com defeitos mentais, do sistema nervoso ou da fala. O materialismo em uma vida pode conduzir à construção de um corpo na vida seguinte no qual as partes brandas estejam endurecidas e partes que deveriam ser duras estejam abrandadas. Fazer caso omisso da verdade reiteradamente de modo a servir aos próprios desejos egoístas em uma vida pode conduzir a um desajuste entre o Ego e as forças da verdade, quando o arquétipo do corpo físico para a próxima vida esteja sendo formado. Isso pode conduzir a uma malformação do arquétipo e, por conseguinte, malformação do corpo na vida próxima. Aqueles que não conseguem fazer um uso apropriado de seus sentidos em uma vida, que tratam de isolar-se do mundo a seu redor, que ignoram os gritos de ajuda ou a oportunidade de ver as condições e necessidades de outros podem sofrer deficiências auditivas ou visuais em sua próxima vida.
Os clarividentes, além disso, vêem alguns defeitos congênitos que não são devidos a ações em uma vida anterior. Alguns Egos podem não ter feito nada particularmente errôneo, porém, talvez necessitem concentrar-se no desenvolvimento de certos poderes da alma e habitar um corpo com certas limitações pode ajudar-lhes a centrar seus esforços no desenvolvimento desses poderes da alma enquanto lutam para superar ditas limitações. Alguns Egos podem encontrar-se no processo de reestruturar um órgão em particular e pode ser que nos estados de transição esse órgão não funcione bem. Esta é a origem de alguns dos problemas oculares que pessoas sofrem, já que o olho está em processo de reestruturação para que, em vez de receber raios refletidos e formar uma imagem na retina, o chamado ponto cego seja sensibilizado e as pessoas passem a enxergar desde o interior do olho, vendo diretamente o objeto em si, de fora e de dentro ao mesmo tempo. Imediatamente antes de um Ego entrar em um feto, contempla um panorama da vida próxima. Se o Ego vê que uma vida particularmente difícil lhe está reservada, é tomado de pânico e trata de escapar do ventre materno, podendo causar uma desconexão parcial entre os centros sensoriais do corpo etéreo e do corpo denso, de forma que a cabeça etérea se estenda sobre a física. Assim, pois, o espírito não pode entrar no corpo e controlá-lo. Um retardamento mental sobrevém.
O cientista materialista vê os defeitos congênitos como o resultado da hereditariedade, dos fatores ambientais e do "azar" (o qual determina que genes receberão os descendentes de cada progenitor e que genes e cromossomos serão influenciados por fatores ambientais). O clarividente vê os defeitos congênitos como o resultado de ações passadas e necessidades presentes de desenvolvimento anímico por parte do Ego que renasce. Estes dois pontos de vista podem ser aproximados se se reconhece que aqueles eventos atribuídos ao "azar" são, de fato, controlados inteligentemente. Poderíamos ter, então, o seguinte quadro unificado: um Ego, devido a ações passadas ou a necessidades presentes de desenvolvimento anímico, precisa habitar um corpo com certas limitações. Os Anjos do Destino encontram para este Ego uns pais que podem proporcionar genes e estruturas cromossômicas adequadas. Os Anjos do Destino supervisionam o processo de replicação para assegurar que seja obtido de cada um dos pais o jogo de genes apropriados e que esses genes sejam (se for necessário) mudados, segundo as necessidades do Ego reencarnante. Este quadro resulta certo nos casos em que sucedam mutações "naturais". Quando os seres humanos introduzem agentes mutágenos em seu meio ambiente, já não se dá a situação natural. O homem recebeu o livre arbítrio e tem o poder de fazer coisas daninhas para ele e para os outros. Quando o homem introduz agentes mutágenos em seu meio ambiente, pode estar iniciando uma cadeia de causa e efeito. Pode estar causando malformação e disfunção de corpos que, de outra maneira, teriam sido completos. Em tais casos, estão se acumulando dívidas que necessitarão ser saldadas em um tempo futuro.
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Birth Defects
The physical process by which a baby is produced is quite intricate. The human body is composed of structural units called cells. Each cell contains a central part, called the nucleus, which is surrounded by cytoplasm, which is surrounded by a wall. In the nucleus are "genes" which contain the coded patterns according to which the various proteins in the body are built. These genes are linked together into chains called chromosomes. When an offspring is to be produced, the chromosomes within a cell must duplicate, and the duplicated chromosomes then go to form a sperm cell or an egg cell. A sperm cell unites with an egg cell, and the resulting cell then proceeds to duplicate and the embryo begins to grow.
If one or both parents have defective genes, and if the parent's defective genes are among the half that are transmitted to the sperm and egg, then the baby will have defective genes and may have corresponding structural and functional weaknesses in its body. In the duplication and separation processes in the production of the sperm and egg and in the early growth of the fetus, if a gene is not duplicated accurately, or if a portion of a chromosome gets broken off or if chromosomes break and reattach in improper order, or if too many or too few chromosomes get transferred to the sperm or egg, then structural or functional weaknesses in the body may result.
Throughout the ages there have always been (as far as we know) low levels of "cosmic rays" that are capable of producing genetic and chromosomal mutations. Also, viral infections that can induce mutations (such as the virus that produces German measles) have been around for some time. Mankind has, however, introduced into his environment various new factors that are able to significantly increase the number of mutations. High-energy radiation produced by X-ray machines, or radioactive materials or video screens; some chemicals (mustard gas, formaldehyde, dioxan, caffeine, cigarette smoke, alcohol, leqad, herbicides, acridine dyes, apoxides, ethyl urethane, phenol, manganous chloride, bromouracil, etc.); and some drugs (LSD, diethylstilbestrol, aspirin, hormones. etc.) have been found to increase the number of mutations. In general it is the pregnant mother who must avoid these mutagenic agents, but in some cases the mutation can originate in the father. Soldiers who were assigned the job of spraying herbicides in Vietnam were found to father an unusually large number of defective children when they returned to their wives in the United States.
Clairvoyants see that many congenital defects had their origin in a past life. Max Heindel notes (see "Web of Destiny," pp. 58-71) that when the creative force has, in one life, been wasted on gratification of the passions, then there is a dearth of creative force available in the next life for the building of the brain, nervous system, and larynx. Thus, the Ego may be born into a body that has mental, nervous, and/or speech disorders. Materialism in one life can lead to a construction of a body in the next life in which parts that should be soft are hardened, and parts that should be hardened are soft. Protracted disregard for truth in order to serve one's one selfish desires in one life can lead to misalignment of the Ego with the forces of truth when the arvchetype is being formed for the body for the next life. This can lead to malformation of the archetype and thence to malformation of the body for the coming life. Those who fail to make proper use of their sense organs in one life, who try to shut themselves off from the world around them, who ignore the cries for help or the opportunity to see the conditions and needs of others, may have impaired hearing or siight in their next life.
Clairvoyants also see some congenital defects that were not due to actions in a previous life. Some Egos may not have done anything particularly wrong, but may need to concentrate on developing certain soul powers, and inhabiting a body with certain limitations may help focus their efforts on developing these soul powers as they struggle to overcome these limitations. Some Egos may be in the process of restructuring a particular organ and in the transition stages that organ may not function well. This is the origin of some of the eye problems that people have, as the eye is in the process of being restructured so that instead of receiving reflected rays and forming an image on the retina, the so-called blind dpot will be sensitized and people will look out through the eye and see directly the thing itself, both inside and out. Just before an Ego enters into a fetus, it sees a panorama of the coming life. If the Ego sees that a particularly difficult life is in store for it, panics, and tries to escape from the mother's womb, it may cause a partial disconnection between the sense centers in the etheric and dense bodies, so that the etheric cranium extends above the physical cranium. Then the spirit cannot enter into the body and control it. Idiocy results.
The material scientist sees congenital defects as being the result of inheritance, environmental factors, and "chance" (which determines what genes an offspring will get from each parent and what genes and chromosomes get influenced by environmental factors). The clairvoyant sees congenital defects as being the result of past actions and current soul development needs of the Ego that is coming into the body. These two points of view can be united if it is allowed that those events attributed to "chance" are, in fact, intelligently controlled. We then may get the following unified picture: An Ego, due to past actions or current soul development needs, is in need of inhabiting a body that will have certain limitations. The Recording Angels find for this Ego some parents who can provide appropriate gene and chromosome structures, and the Recording Angels oversee the replication process to make sure that the appropriate choice of genes is obtained from each parent and that these genes are (if needed) mutated as required by the needs of the incoming Ego. This picture holds true for cases in which "natural" mutations occur. When humans introduce mutagenic agents into their environments, the natural situation no longer exists. Man has been given free will, and has power to do things that are harmful to himself and others. When man introduces mutagenic agents into his environment, he may be initiating a cause-effect chain. He may be casuing malformation and malfunctioning of some bodies that would otherwise have been whole. In such cases, debts are being stored up that will need to be repaid at some future time.
Reference
-Heindel, Max. Web of Destiny. Oceanside, Cal.: The Rosicrucian Fellowship, 1928
Un Mil Bendiciones y Una Más
Sol Monasterio
__._,_.___
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